La camilla
Erase una vez hace muchos muchos muchos años, cuando el héroe en cuestión apenas era un aspirante a tal calificativo, llegan a una casa donde habia un paciente que necesitaba traslado, por azahares del destino era también una casa pequeña, y solo entraría la camilla marina, por lo que le piden a nuestro protagonista que vaya por la camilla, llega a la puerta extiende la camilla y trata de entrar.
¡¡¡¡SORPRESA!!!!
La camilla no entra y le grita a sus compañeros, quienes al ver que trataba de entrar con la camilla abierta le gritan al reves, él, toma la camilla la voltea y sostiene en posición vertical aún abierta e intenta nuevamente pasar.
¡¡¡¡SORPRESA!!!!
Desconcierto total, aun asi no entra!!!!!, hasta que uno de sus compañeros se apiada, toma la camilla, la dobla y entra con ella.
Suele suceder, y no solo en las películas, jijijijiji, jefe ya te queme.
¡¡¡¡SORPRESA!!!!
La camilla no entra y le grita a sus compañeros, quienes al ver que trataba de entrar con la camilla abierta le gritan al reves, él, toma la camilla la voltea y sostiene en posición vertical aún abierta e intenta nuevamente pasar.
¡¡¡¡SORPRESA!!!!
Desconcierto total, aun asi no entra!!!!!, hasta que uno de sus compañeros se apiada, toma la camilla, la dobla y entra con ella.
Suele suceder, y no solo en las películas, jijijijiji, jefe ya te queme.
3 comentarios
Anónimo -
Martha -
Vitor -